Me encanta hacer pan en la casa,
no sólo porque puedo hacer las combinaciones de sabores que quiero, sino que
también por el rico olor que sale a pan recién hecho. Esta vez quería hacer un
pan de molde con mucha fibra pero que quedara esponjoso y no de textura densa.
El resultado me encantó, ya que quedó de una miga suave y muy sabroso.

Todas las harinas que usé las
encuentran en los supermercados al igual que la avena. El germen de trigo lo
encuentran en tiendas de productos naturales (yo compré el mío en la tienda
Dellanatura), es rico y aporta mucha fibra.

PAN DE CEREALES

1 pan

·      
200 gr de harina
blanca con semillas (o harina todo uso)

·      
300 gr harina
integral

·      
70 gr harina de cereales
(o de centeno)

·      
90 gr avena machacada
o tradicional

·      
3 cucharadas de germen
de trigo

·      
1 cucharadita de sal

·      
35 gr de levadura
fresca

·      
¼ taza de aceite de
oliva

·      
1 cucharada de miel
de abejas

·      
120 ml de leche
tibia

·      
100 a 120 ml de agua
tibia

Poner las harinas junto a la
avena y el germen en un bol grande. Espolvorear la sal por los bordes de la
harina y hacer un hueco en el centro. Agregar la levadura al medio y con las
manos desmigajar (deben quedar pedazos bien pequeños), agregar la leche y
deshacer la levadura. Agregar la  miel y el
aceite y el agua, con las manos ir juntando todo hasta tener una masa (blanda
pero no pegajosa). Pasar la masa al mesón y amasar por 10 minutos o hasta que
la masa esté lisa y elástica. Dejar reposar 30 minutos y luego con las manos
formar un rectángulo del largo del molde que vayan a utilizar. Enrollar la masa
y poner en el molde preparado. Tapar el molde y dejar leudar por 1 hora o hasta
que la masa haya doblado su tamaño.

Calentar el horno a 200C. Pincelar
la cubierta de pan con huevo batido o leche, espolvorear avena y hornear por 20
minutos. Bajar la temperatura a 180C y hornear por 15 a 20 minutos adicionales
o hasta que el pan esté cocido. Dejar enfriar y desmoldar.