
Odio botar comida, por lo que siempre estoy viendo qué hacer con la comida que va sobrando o qué hacer con frutas y verduras que están media pasadas. Así que cuando vi unas zanahorias que ya les estaban saliendo raíces, supe que las tenía que usar inmediatamente. Por supuesto, que mi primera opción fue hacer un queque de zanahorias, que me ENCANTAN. Claro que tenía que hacer alguno distinto, ya que en el blog tengo muchas recetas. Así que nada mejor que hacer uno bien rápido, uno que ni siquiera hubiera que rallar las zanahorias.
Quedaron deliciosos, ideales para la colación de Uds., de sus niños, para el desayuno o la hora del té.
