
Tenía un “happy hour” de mamás del colegio de mi hija y como me tocaba llevar algo de aperitivo decidí hacer este delicioso pan (los que me siguen saben que me fascina la panadería).
Hice doble receta, así dejé uno para la casa y el otro lo rellené con queso de cabra para llevarlo a mi salida. Quedé muy contenta con el resultado ya que me lo alabaron mucho y vi cómo se lo comieron con muchas ganas. Es un pan fácil de hacer y muy sabroso, así que no dejen de hacerlo; sobretodo que no hay nada como el pan casero desde el olor hasta el sabor.
